sábado, 14 de noviembre de 2009

Conceptos e Historia / Concepts and History


La curiosidad por la historia y la epistemología de la mirmecología me llevó hace poco a contactar con Olivier Perru, investigador francés de la Universidad Católica de Lyon. Amablemente me envió su artículo ”La problématique des insectes sociaux: ses origines au XVIIIè siècle et l’œuvre de Pierre-André Latreille” (Bulletin d’Histoire et d’Epistémologie des Sciences de la Vie, 10 (1): 9-37. 2004). En este trabajo analiza las ideas y conceptos empleados en el siglo XVIII para describir y comprender las sociedades de insectos. A este respecto, muestra cómo el pensamiento y la realidad social de la época quedan reflejados en las obras pioneras de Buffon, Bonnet y Geoffroy, a los que seguirá Pierre Latreille, autor de uno de los libros fundamentales de la historia de la mirmecología: Histoire naturelle des fourmis (1802).

Olivier Perru es un sabio de extraordinaria calidad. Tiene en curso una obra monumental titulada De la société à la symbiose. Une histoire des découvertes sur les associations dans le monde vivant , de la que han aparecido hasta ahora los dos primeros volúmenes (2003 y 2007) correspondientes a los periodos de 1870-1930 y 1930-1970. (Página web de Olivier Perru).




¿Tiene interés, en el decurso de la ciencia actual, el estudio de la historia y la epistemología de las disciplinas biológicas, por ejemplo de la mirmecología? Yo creo que sí; intentaré explicarlo brevemente:

1) La actividad del científico no atañe sólo a los datos (la morfología, la taxonomía, la bioquímica, la etología o la genómica de una hormiga). Antes que los datos de observación están los conceptos (elaborados o no, conscientes o no) que sirven de matriz y filtran la realidad sometida a observación y experimentación.

2) Los conceptos se insertan en la historia, son históricos, y nosotros mismos, a comienzos del siglo XXI, disponemos de determinadas concepciones vinculadas directamente al pasado reciente y sujetas a cambios en el futuro.

3) Pondré un ejemplo: desde las primeras concepciones de lo que era una colonia de hormigas (si era república o monarquía, su grado de organización y cohesión, etc.), hubo un debate que culminó con el famoso artículo La colonia de hormigas como organismo de William M. Wheeler (1911). El autor propuso considerar a la colonia como un novedoso nivel de integración superorgánica alcanzado por la vida  en su evolución sobre la Tierra. Pero Wheeler no acertaba a identificar la clave o mecanismo responsable de dicha integración orgánica de la colonia. Años más tarde inventó –literalmente, inventó– el concepto de trofalaxia. A tal punto era un concepto antes que mero hecho de observación, que la trofalaxia fue pasando, en la interpretación wheeleriana, de ser el intercambio alimentario entre miembros coloniales a incluir poco a poco el trasvase de sustancias químicas reguladoras, presagiando el descubrimiento de las feromonas que vendría mucho tiempo después. La comunicación feromonal es ahora un territorio autónomo y ampliamente explicativo de la vida social de las hormigas.



Trofalaxia entre dos obreras de Camponotus lateralis. El alimento fue tintado de rojo con rodamina, como puede apreciarse en la cabeza de uno de los individuos. (Según Alberto Sánchez Martín. 2009. Foro Lamarabunta: Trofalaxia de camponotus lateralis. Comida tintada. Fotos.)


Los conceptos, su complejidad e historicidad, afectan de lleno a toda la biología y, por supuesto, a la mirmecología. Así, tenemos en primer plano nociones como inteligencia, adaptación, plasticidad, variabilidad, lenguaje, uso de instrumentos…, o categorías como las que intentan describir y ordenar el laberinto polimórfico de las hormigas. Conceptos, todos ellos, problemáticos y cambiantes, a veces ambiguos, cuyo empleo impreciso y diferencial influye, indefectiblemente, en la cabal comprensión de los fenómenos.

4 comentarios:

  1. Afortunadamente, me parece a mí, que la Ciencia se va independizando progresivamente de los conceptos y ambiente social en el que se desarrolla aunque ésto varía mucho según el campo de la Ciencia de que se trate: no afecta igual a la física teórica, que las células madre, por poner un ejemplo...

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  2. Claro, en la medida que una disciplina toca más de cerca al hombre, suele haber más interpretaciones y susceptibilidades. Lo cual no deja de ser turbador tras varios siglos de método científico.
    El problema creo que surge, sobre todo, cuando los científicos (también los físicos teóricos de partículas y de la astrofísica) salen de las ecuaciones y las estadísticas para extrapolar conclusiones sobre lo humano y lo divino. Entonces, a veces, las barbaridades pueden ser lamentables.

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  3. Leyendo por tu blog... voy y me encuentro con una foto familiar, jejeje.
    Aprovecho para felicitarte por el enorme trabajo que estás realizando.
    Un fuerte abrazo y muchos ánimos!

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  4. Una fotografía fantástica, Alberto.
    Muchas gracias.

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